220 }olettn de la Real ylcademia Gallega
? que m?s copia la fisonom?a traditional y pintoresca de nuestro
?pa?s...? (1).
Cu?ntas veces el alma de la insigne gallega, aquejada por ?nti
mas tristezas, al cantar desdichas del pueblo habr? desahogado sus
penas y llorado sus propias desventuras, identific?ndose as?, Inds
y m?s, por parecidos infortunios, con el alma popular. ?Es la
.
? las bellezas gallegas; sus afinadas facultades sorprenden en los
?secretos del lenguaje los del alma, de que arrancan sentidos la
? mentos al impulsar la cuerda de la sensibilidad? (2) .
La placidez y lo risueflo que hay en Cantares, se ven susti
tu?dos por el pesimismo corrosivo y la hid. de las desilusiones en
Follas Novas.
Habr? en ellas m?s arte, m?s maestr?a en el manejo de la
m?trica, m?s superioridad en el pensamiento y conceptos; pero no
encontramos en ellas aquella naturalidad, aquella sencillez y aquel
encantador y agreste perfume quo nos deleita, encanta y emociona
en los Cantares.
A..
Follas es fiel reflejo del estado moral de ?nimo de su autora,
sobre todo el libro II, Do ?ntimo, donde brillan joyas como Na
Catedral, en la que nos dice c?lno templaba sus penas y amarguras,
tantas y tan grandes, orando ante los pies de la imagen de Jes?s de
Nazareth que se venera en la capilla de la Corticela, y ? Padr?n!
1 Padr?n!, que no tiene parecido, por su ternura y sentimiento, en
ninguna de las lenguas de la Peninsula, seg?n nos confiesa Cas
telar (3).
Para un poeta como Rosal?a, era necesario un prologuista
como Castelar. Y si ?ste, al elogiar la labor de nuestra paisana,
di? el testimonio asombroso de su poder imaginativo al describir
a Galicia sin conocerla, y sinti?ndola como cosa propia, no fu?
solamente debido al enorme talento del orador insigne, sino que
en las obras de Rosal?a sinti? y conoci? a Galicia, por lo maravi x.
llosamente que en ellas se describe y se retrata.
Todo Follas es trasunto fiel de las hondas penas de Rosal?a,
quo semejan cristalizar en la sentida y melanc?lica balada Negra
sombra (4) trist?simo y dolorido ?ay! salido de lo m?s profundo
(1) De mi tierra, p?ginas 27, 30 y 31.
(2) MARQUES DE FIGUEROA, De la poes?a popular pallego, p?gina 63. Ma irid, 1889.
(3) Pr?logo a Follae Novas, p?gina svr, primera edici?n, 1880.
(4) Nests en m?sica par el inepirado maestro Montes, parece una p?gina arrancada de
las composiciones de Grieg.