BOLETIN DE LA' REAL ACADEMIA' GALLEGA F 227':
guridad,de'gela bdlber, me la Aieron e'entregaron"..Po? todo lo
cual 'nuevamente requiere al arzobispo y, le suplica "de se lie?
gar. a la justicia y concordia . con estos ?caballeros...; ca yo estoy
presto de me interponer e trabaj ar la concordia" ; pero exige que,
previamente se le ?paguen las alcabalas .reales y . otros tributos.
Para aclarar l? que se refiere a l? f?rtalez? de Mellid, parece
conveniente 'extractar. aquf 'lo que declar? en el proceso el escu=
dero Juan Mellid (99), quien asegur? "que fueran derrocadas la
fortaleza.y. eas? de Mellid p.m el conde de Trastamara y el duque ?
de. Arjona. Despu?s se adue??ra 'de'ella y de sus .tierra's, contra
la Voluntad del Patriarca,. S?ncho de Ulloa. Puso ?ste . en ella.
de merino a Garc?a de Recimil, despu?s de reedificadas, y la
posey? hasta que vino "el corregidor Pareja, el . cual fuera a la
fortaleza de Pambre en donde Sancho de Ulloa estaba, a req?e
rirle la entrega"de la mism i con todo el territorio de Mellid. Se
neg? a esto Ulloa, y Pareja le hace un segundo req?erimiento,
que .di? por resultado la entrega que el mismo ? Recimil ejecut?,
posey?ndola Pareja por alg?n tiempo en nombre de don Enri
que"..Despu?s "Luis de Acebedo, hermano del Patriarca.,. tomo'
a Mellid, . derroc? la fortaleza, llev? a Pareja preso a Santiago",
y con la piedra de la fortaleza se edific? el convento de Sancti
Spiritus.
Parece claro que la entrega de Mellid y de su castillo y la
estancia en los mismos a que se refiere Pareja. en . su requeri
miento (99) al arzobispo viene siendo la entrega que le hizo
Sancho de Ulloa, de que habla el declarante, y aunque no sea
necesario . encontrar verdadera oposici?n, se notan algunas di
ferencias entre la deelaraci?n de Juan Mellid y,las afirmaciones
de dieho requerimiento, pues en' ?ste (i?o) no se habla de un sole
caballero, Sancho de Ulloa, sine en plural de varies, entre los
cuales es cierto que figuraba tambi?n dicho Ulloa. Adem?s ,el
requerimiento al . arzobispo da a conocer que no hubo dificul
tad alguna para que Mellid le fuese entregado; en cambio, en la
declaraci?n citada aparece alg?n obst?cul?, pues no le fu? en
tregada al primer requerimiento, sino despu?s del segundo. Sin
duda que `presentaba las cosas tan llanamente p?ra influir en el
(es) CousELO, lee. cit. p. 73.
(99) A. A. f. 152.
(too) A. A. f. 144 y 149.