3olettn de la Real jlcademia Gallega ros
tormentosa la mar que en eLresto de la costa y adquiriendo all? las corrien
tes mayor violencia?. ?Con vientos del NE. frescos ?a?ade se arma
mucha corriente, siendo muy dif?cil poderlo montar?, y que ?otro tanto
ocurre con los vientos del SW.? Precisamente Ios vientos m?s favorables
para la navegaci?n entre los dos extremos del Golfo Cant?brico.
Y si volvemos la vista hacia el litoral del E., nos hallamos con que
?rara vez logran los veleros despu?s de Bares sortear con ?xito, en mal
tiempo, los puertos del Cant?brico, obstru?dos por el oleaje de las barras,
que el mar embravecido les hace inabordables?.
Por otra parte, bien sab?an ya Ios antiguos que el Ortegal y la Es
taca, eran los cabos m?s sobresalientes de la ib?rica pen?nsula hacia el polo
?rtico y de consiguiente los m?s pr?ximos y por tanto m?s ventajosos
para la navegaci?n al noroeste de los galos y tierras de los albiones e
hibernios, como opuestos a ?stas. Es as? que Vivien de SaintMart?n, en
su Historia de la Geograf?a, al ocuparse de la obra de Tolomeo, manifiesta
como el m?todo empleado por ?ste al construir sus famosas Tablas, con
siste simplemente en reducir los elementos itinerarios a cifras astron?mi
cas. El ge?grafo, en efecto, no tuvo ni pod?a tener otros materiales que
los documentos itinerarios de tierra, o de mar, ?nicos que conoci? la
antig?edad, ?nicos que Tolomeo encontr? a su alrededor, y los ?nicos
que conten?a la obra de Mar?n de Tiro, de procedencia fenicia. Pues
bien; desde el momento que el m?s prestigioso ge?grafo de la antig?edad
situa el Lapaciacoru y el Trileucum (promontorios de la Estaca y Orte
gal), a los 450 so' de latitud, o sea a la misma altura exactamente que el
promontorio del Pirineo Cant?brico, denominado Oiaso, ?nicos cabos
que lleva tan al N. cual resulta en la realidad, demuestra palpablemente
que ya se consignaba as? en los documentos n?uticos utilizados por el
ge?metra alejandrino para su magna Gu?a Geogr?fica, considerada, 'seg?n
frase de H?bner, como la expresi?n de los conocimientos geogr?ficos que
en la antig?edad cl?sica' se logr? alcanzar. Los autores de ?stos, por tanto,
se hab?an dado perfecta cuenta del lugar que aquellas grandes avanzadas
territoriales ocupan'en el extremo occidental del Golfo.
A guisa de corolario de todo lo expuesto, diremos como un autor
que los estudios geogr?ficos han de resolverse:'por la Geograf?a y en el
presente caso bien responde tal principio a los hechos, cual seguiremos
apreciando.
En Bares, efectivamente, conforme insinu? en la breve monograf?a
sobre ?Burum?, dedicada a demostrar como esa antiqu?sima ciudad galle
ga del, convento lucense, mencionada par el citado ge?grafo egipciano
Claudio Tolomeo, corresponde a este interesante puerto, tenemos las