314 BOLET?N DE LA REAL ACADEMIA GALLEGA
En Septiembre signiente se encarg? de la presidencia el acad?
mico de n?mero y catedr?tico D. David Fernandez Di?guez. Este
docto profesor, que .ya en' 1926 actuara como secretario interino de
la Corporaci?n bajo la presidencia del luego dimision?rio tambi?n
por respetables motivos de salud? D. Eladio Rodriguez Gonzalez,
tuvo asimismo un r?pido transito en el puesto directivo. 'Despu?s
? de haber presididp.en Marzo de 1936 las solemnes sesiones p?blicas
de recepci?n oficial ?de los acad?micos electos D. Manuel Cas?s For;
n?ndez y D. Alejandro Barreiro Noya, falleci? 'el se? or Fernandez
Di?gu?z el 24 de Diciembre de aquel mismo a?o.
Fu? enton?es cuando se design? presidente accidental, y des
pu?s interino, al se?or Cas?s, que tuvo como secretario al que ya
ven?a si?ndolo, D. Fernando Martinez Mor?s. Interregnn todo
?ste de sensible 'anormalidad,, como se ye, durante el cual nada ?
unificado y. correlativo pudo hacer la Academia, cadavez m?s mer
mada on sus componentes. ?
Y hubo todav?a nuevas v?ctimas y acervos dolores. La inespe"
r?da y tr?gica muerte en el frente de guerra ?11 de Septiembre
de 1937? del ilustre periodista, .catedr?tico e inolvidable secretario
Sr. Martinez Mor?s, contribuy? a demorar la actuaci?n de este
organismo, por otra parte dificultada por cr?ticos acontecimient?s ?
nacionales.
En 5 de Octubrede 1937fu?`designado secretario interino don
Alejandro Barreiro. , Entonces, con el concurso del acad?mico
numerario D. Angel del Castillo, c?mo tesorero, reanud? sus fun
ciones la nueva Junta de 0obierno que, presidida sin interrupci?n
hasta el present? por D. Manuel Oasis, acometi? con buen ?nimo la
labor quo' s impuso de reconstruir y' eslabonar lo interrumpido y
proseguirlo. Los momentosen que`puso mano en ello eran descon .
soladores para la vida de relaci?n de la Academia. Hab?a como un
colapso de actividades al que urgia poker fin. '
? En lo econ?mico, la situaci?n era no menos lamentable. Se
carecia de recursos y adeud?banse incluso los parcos haberes del
personal. ` Suspendida on 1936 la subvenci?n del Estado de` la
cuals?lo`se cobr? es? a?o el primer trimestre, suspendidas tam
bi?n o anuladas las obvenciones de ' M?nicipios y Diputaciones,
?nicamente la! Corporaci?n provincial Incense manten?a la asigna
ci?n de 603 pesetas, siempre muy agradecida.
Las A.sociaciones do Am?rica protectoras de la Academia hab?an
dejado de, funcionar. La Iniciadora de la Habana ?cuna, efecti